Digo adiós a los que quieran
mentiras perdurables
en el torrente. Cosechadas
son ya las flores, y se encalman
recuerdos, miradas, alas,
todo mi mar. Benigno
aire nocturno acerca
claridad de fuente, ocultas
voces del fuego. Por el fiel silencio
de nobles árboles por mí amados,
camino al olvido, dejando atrás
amores, veleros, sufrimientos. Últimas
señales de pasos.
Que profundo :)
ResponderEliminarTe sigo!